Mientras que la vacunación avanza lento en la Argentina, la circulación de variantes del coronavirus como la de Manaos y Río de Janeiro, aumenta la preocupación entre las autoridades nacionales y provinciales.
Son muchas las ciudades del sur de Brasil que están atravesando un colapso en sus sistemas sanitarios, como es el caso de Foz de Iguazú, y las alarmas están puestas en los pasos fronterizos, en donde la circulación de bienes y personas es constante.
A pesar del riesgo de las nuevas cepas y los crecientes casos en los alrededores con Paraguay y Brasil, la provincia de Misiones es, irónicamente, la que menos porcentaje de vacunados con dos dosis ostenta: 0,52%.
“Hemos solicitado un mayor número de vacunas, porque hay ciudades que deben estar blindadas una vez que se abran las fronteras. Son 12 millones de personas por año las que cruzan entre Puerto Iguazú y Foz, y 11 millones lo hacen entre Posadas y Encarnación (Paraguay). Solo con esos dos pasos tenemos 23 millones de personas. Y cuando se pueda abrir, esas ciudades deben estar blindadas por vacunas y con su población inmunizada”, explicó Herrera Ahuad en dialogo con TN.com.ar.