Provinciales
Eldorado: gracias al espacio maker encontró la motivación para terminar el secundario a los 36 años
Por: Brisa Bujakiewicz
Mauro Andrés Araujo tiene 36 años, su día inicia a las 4:30 de la mañana cuando sale de su casa camino al trabajo. En el 2021 encontró la posibilidad de aprender robótica y eso lo motivó a terminar el secundario.
“El aula me dio una gran oportunidad que nunca pensé en tener”, confesó Mauro, quien sentía que la posibilidad de aprender robótica y programación era algo ajeno a él.
Mauro Araujo (36) es de Eldorado, Misiones. Siempre le interesó la robótica y la programación, pero veía lejana la posibilidad de adquirir los conocimientos necesarios para aplicar los mismos a su vida diaria.
Su día inicia a las 4:30 de la mañana cuando parte rumbo a su trabajo como planificador de mantenimiento de una empresa en la ciudad de Eldorado.
En abril del 2021 decidió cambiar su rutina e ir por más, ahí es cuando encontró la opción de estudiar aquello que tanto le interesaba como lo era la robótica. “Siempre me gustaron todos los temas de electrónica, automatizaciones. Siempre fui muy curioso, me interesa investigar cómo funcionan los artefactos electrónicos y automatizados”, expresa y añade: “Sabía que existía la Escuela de Robótica, pero para mí, no estaba a mi alcance porque soy un empleado que tiene muchas horas en el trabajo, así también la distancia me dificulta”.
Si bien sus horarios son limitados, hace un año Mauro inició el curso en las Aulas Maker. En su trayecto, el cual dura 40 minutos desde el trabajo hasta las aulas; Mauro lee acerca de programación y aprovecha a mirar videos que contribuyen al aprendizaje que adquiere en el curso. “Cuando inicié las clases sentí mucha emoción, porque nunca pensé tener una posibilidad como esta y hasta el día de hoy espero los lunes para ir a las clases, no pienso abandonar. El cansancio se opaca por la motivación y la satisfacción”, resaltó.
Pero los objetivos de Mauro no terminan ahí. Este año decidió culminar la secundaria, luego de la motivación y el apoyo que recibió por parte de sus compañeros del aula, los facilitadores y su familia, compuesta por su pareja Yolanda y su hijo Tahiel (6). “Ellos están muy contentos, me apoyan mucho, comprenden mi tiempo”, indicó Mauro destacando el apoyo y el orgullo de su familia.
La Escuela de Robótica es el gran orgullo de Misiones. La primera pública y gratuita de la Argentina. El año pasado formó a más de 15.000 alumnos en Posadas y a otros 5.000 más en el interior través de los 77 Espacios Maker disponibles, a razón de uno por cada municipio misionero. En este año se capacitarán a 25 mil alumnos entre Posadas y el interior. Todas estas actividades se enmarcan en la Ley de Educación Disruptiva, promovida por el Diputado Carlos Rovira.
Creación de una app
En cuanto a su futuro en el estudio, aprender programación es uno de sus mayores intereses. Así también, el lenguaje de códigos es uno de los temas en los cuales anhela especializarse. “Tengo muchas expectativas para este año de poder realizar cursos de programación. Quiero aprender, educarme más, tener más conocimiento”.
Respecto a los logros obtenidos tras lo aprendido en las Aulas Maker, Mauro realizó una aplicación para celular: “Hice un control de temperatura y humedad a base de la placa SP8266 y lo enlace a una aplicación que he creado para tener una lectura a larga distancia”, así también admitió que cuenta con grandes proyectos en los cuales se encuentra trabajando. “La programación de las aplicaciones futuras ya las tengo, debo realizar las pruebas necesarias para adaptar a las problemáticas cotidianas”. En este sentido, Mauro explicó que su mayor importancia es dar fin a los problemas diarios de la sociedad. Ya que la ciudadanía, por más que no la perciba, se encuentra rodeada de robótica y esto puede ser una herramienta a mucha de las problemáticas usuales.
En relación a su rutina, Mauro comentó que el cansancio que puede generar trabajar y estudiar al mismo tiempo no lo advierte; debido al entusiasmo que le produce el ir al aula y aprender cada día algo nuevo. “El cansancio no lo siento porque es algo que a mí me gusta mucho, me motiva. Más que un aula es un cable a tierra, es un espacio que me da ganas de seguir aprendiendo y avanzar”.
Una motivación para la vida
Los cambios que le generó en su vida diaria fueron notorios para él: “Me sentía muy poco motivado con el día a día, la rutina. La escuela de robótica hizo que mis rutinas sean muy aceptables. Tengo objetivos claros, muchas motivaciones”, afirmó y agregó: “El aula me dio una gran oportunidad que nunca pensé en tener”.
En cuanto a sus máximas atracciones en las Aulas Maker expresó que el conocer la robótica fue un cambio de vida para él, compartir con sus compañeros, debatir, ejecutar ideas, destacando siempre la paciencia de los facilitadores. “Pude canalizar el estrés de la vida cotidiana, me liberó de muchas presiones, cargas. Me dio ganas de seguir avanzando, de saber que tengo una oportunidad, que cualquiera puede tener la oportunidad”, destacó Mauro y añadió: “Me fui al aula maker sin saber que existía una placa de desarrollo que era capaz, por medio de programaciones, de encender una luz led. Para mí eso fue algo maravilloso, no pensaba que una persona lo podía hacer tan fácil. Al ver los distintos artefactos, los juguetes que prenden luces, sus piezas se mueven, siempre pensé que solo los Ingenieros podían hacer eso y yo fui capaz de hacerlo”, dijo y resaltó su experiencia, en la cual sintió que sus ideas y su creatividad se desarrollaron en gran medida reafirmando así su decisión de ir a las clases.
“Le diría a las personas que se animen a iniciar, a aprender lo que es la escuela de robótica, porque les va a cambiar la vida. Eso pasó conmigo; después de concurrir a las clases cambié mi visión, me di cuenta que tenía muy limitado mis conocimientos y esto me ayudó a cambiar. Le puedo decir a las personas mayores o menores que se animen, porque la robótica, la programación, la automatización ya no es el futuro, es el presente”, reafirmó Mauro.
De esta forma, el futuro programador comentó la importancia de la robótica para las personas. “La robótica está en todos lados y no nos damos cuenta. El aire acondicionado, sensores de movimiento, portones eléctricos, alarmas, todo es parte de la robótica, tiene una programación; por eso hay que tener muy en cuenta que la robótica es el presente. Hay que adaptarse a esta nueva era tecnológica que nos sirve a todos, nos facilita la vida. Recomiendo muchísimo a las personas que puedan asistir a las aulas. No existe límites para la imaginación”, indicó.
Para cerrar expresó: “Depende de cada persona enfocarse en un objetivo, con las herramientas que nos brindan en el aula maker se puede hacer maravillas. Esto recién empieza, esto da para mucho más. Estoy tan agradecido y contento de poder tener la oportunidad de asistir, ser parte del equipo. Quiero poder crear innovaciones para ayudar a mucha gente a facilitar muchos procesos”.
AULAS MAKER
La localidad de Eldorado cuenta con 1350 alumnos inscriptos en los Espacios Maker, su referente, Soledad Vallejos explicó: “Contamos con todos los trayectos abiertos, por suerte con respuesta muy positiva de parte de la comunidad, el apoyo del gobierno y la municipalidad dando posibilidad de tener los espacios abiertos desde las 8 h. hasta las 21.30 h; todos los días”.
Los estudiantes que recurren a las Aulas Maker van desde los 5 años hasta más de 80.
El pasado año compitieron con diversos proyectos a nivel provincial, el cual les otorgó un amplio reconocimiento ya que, obtuvieron el 1er puesto, donde ganaron un invernadero indoor y el 2do puesto, donde participaron 5 estudiantes de diferentes edades.
Soledad Vallejos expresó al respecto: “Apostamos a mucho más durante este nuevo ciclo, con la posibilidad de abrir una segunda sede en nuestra ciudad ya que somos, después de Posadas, la sede con más inscriptos de la provincia, motivo que nos llena de orgullo”. En este sentido, el espacio ya se encuentra disponible. El objetivo principal es que, tanto la zona este como la zona oeste de la localidad de Eldorado; cuenten con un Aula Maker cerca.
Desde la escuela de Robótica de Posadas se brinda apoyo y capacitaciones para dar inicio y continuidad a los proyectos de la ciudad de Eldorado, por ello cuentan con gabinete pedagógico quienes abordan diversos temas y transmiten los respectivos progresos a cada uno de los inscriptos.
En relación a los diversos avances, Soledad señala: “En la sede de Eldorado contamos con el apoyo del sector de desarrollo tecnológico de la Municipalidad, a cargo de Guillermo Gaudioso; quien nos apuntala dando un gran apoyo y atiende cada una de las necesidades que pueden surgir en la sede, en ese sentido, estamos agradecidos”.
Pero, la labor desarrollada en las Aulas Maker no se detiene en el lugar sino que, se desplaza a diferentes escuelas especiales brindando talleres un día a la semana; convirtiéndose así en parte de la currícula. “Estuvimos dando talleres a escuelas especiales. Este año dedicamos un día para las instituciones que nos pidieron talleres y que seamos parte de su currícula, así como también muchas escuelas primarias que ya tienen sus fechas destinadas durante el año”, comenta Soledad.