IPRODHA: nuevas viviendas rurales en Campo Grande

A la fecha, se llevan construidas y habitadas 64 casas en las respectivas chacras de los colonos de la localidad de Campo Grande. Las tres últimas corresponden a la novena etapa del Programa de Viviendas Rurales del Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional (IPRODHA), que en esta oportunidad benefició a las familias de Raúl Statkiewich, Margarita De Oliveira y Susana De Oliveira.

En este marco, hace unos días, se firmó un nuevo acuerdo para dar inicio a una décima etapa, en la chacra de Carlos Patiño y su esposa, Miriam Machado, colonos provenientes de la zona, quienes viven y producen en el lugar -hortalizas, legumbres, animales de granja para autoconsumo- y, que cumplieron con los requisitos y trámites correspondientes para acceder al beneficio.

Las decenas de casas mencionadas, son el resultado de los convenios entre la Municipalidad local, el Instituto y los dueños de las chacras, interesados en mejorar su situación habitacional para continuar la vida y producción en sus tierras.

En este sentido, desde el Programa expresaron que «el acompañamiento del municipio es fundamental, ya que consiste en la elección de los beneficiarios. Una selección apropiada trae aparejado un buen ritmo de obra y, además, se define qué rol debe cumplir cada uno de los participantes en las documentaciones que firmamos, de esa manera se facilitan los trabajos», señalaron.

En la distribución de tareas, es el IPRODHA quien asigna un presupuesto al proyecto, que luego es destinado a la ejecución de las labores de suelo, conexiones eléctricas, sanitarias, cocina, baño completo, entre todos los materiales y la capacitación necesaria para llevar adelante la construcción. También, es el Instituto quien se encarga de la supervisión, para lo cual designa a inspectores de obras que guían el proceso.

Finalmente, el colono debe cumplir con las responsabilidades asignadas que implican la mano de obra -en la mayoría de los casos se trata de su propia participación con ayuda de familiares y vecinos- y el compromiso de residir en sus chacras una vez que se concluya la edificación. «Así, con el correcto funcionamiento de estos tres pilares que hacen al contrato, todas las obras resultan de acuerdo a lo planificado», mencionaron desde el organismo, a la vez que destacaron el compromiso con la factibilidad de las viviendas rurales en la comuna del intendente local, Carlos Sartori.