Provinciales
El combustible como motor del desarrollo
Por Aníbal Blasco – Licenciado en Comercialización
Herrera Ahuad intenta conseguir equidad en el reparto y costo del combustible para la provincia. Misiones experimenta un fuerte aumento del consumo debido a la reactivación económica en curso. Para continuar incentivando el desarrollo es necesario contar con energía suficiente y accesible.
El lunes pasado, la empresa de bandera nacional YPF subió los precios de sus combustibles entre un 9,5% hasta un 11,5%. Se trata del segundo aumento del año. Luego, incrementaron sus valores las otras refinerías que abastecen al país.
La demanda de combustibles en la provincia de Misiones sigue creciendo y supera ampliamente los valores de la prepandemia, comparando la demanda de todo 2021 (aun con un comienzo de año con sectores rezagados) se consumieron 61.097.000 de litros de combustible más que en 2019, y ya enero de este año registra un aumento del 36% frente al mismo mes de 2019 (prepandemia).
En relación a ello, la tierra colorada se mantiene como la provincia del Nea con mayor consumo, superando año tras año a Corrientes, Chaco y Formosa. Para graficarlo, los primeros datos de enero colocan a Misiones primera en consumo con 46.802 millones de litros en el total de combustibles (naftas, gas oil y GLPA), en segundo lugar se ubica Corrientes con 41.768 millones de litros, seguido de Chaco con 34.706 millones y Formosa por último con 15.782 millones de litros. De hecho, desde algunos medios nacionales se reconoció inmediatamente esta situación indicando la suba del consumo. Solo basta ver las largas filas de autos en las estaciones de servicio para comprobarlo.
Por lo tanto, el gobernador Oscar Herrera Ahuad solicitó que se autorizaran más envíos de combustibles y se considere una baja en los impuestos relacionados con el producto. Para que, de este modo, el valor descienda, se reconozca el consumo y disminuya la brecha nacional.
Asimetrías regionales
Las diferencias en el precio que se detectan en las distintas regiones del país alcanzan un 35% entre el valor que se comercializa en el centro, el norte del país y el sur. En la Patagonia, los combustibles no cuentan con la carga impositiva que se aplica en el resto del país, pues se reconoce su carácter de zona productora. La petrolera nacional YPF y las refinerías presentes en el país habían acordado mantener el precio de los combustibles congelados. La medida se mantuvo desde mayo de 2021 hasta febrero de 2022 donde la actualización de los valores hace que el litro de nafta súper en Posadas alcance $120,70 y en Puerto Iguazú llegue a $123,20, mientras que en Ushuaia y Río Gallegos se paga $88,20 la nafta súper, una diferencia de 39,7% para el mismo producto. Ahora bien, reconociendo a la zona productora en el sur, podemos comparar el precio de la nafta súper en capital federal a $109,90 con el litro de nafta super de Posadas a $120,7, lo que arroja una 10% más caro o con Iguazú a $123,20 un 12% más caro.
Pero eso no es todo, ¿Qué pasa con las demás compañías petroleras? Las marcas competidoras a la estatal YPF tiene la facultad de regular sus precios dentro de un marco relativo, en Posadas podemos encontrar la nafta súper de Shell a 124,90 y hasta 129 pesos y la nafta Premium desde 146,30 hasta $158 dependiendo la estación a la que se llegue, mientras que Axion registra precios de nafta súper desde $127,9 hasta $135 o más. Esta es la mayor diferencia con YPF, donde la compañía de bandera a través de su red integrada actualiza el precio por igual distribuido por zonas, de allí el acertado reclamo y búsqueda del Gobernador Herrera Ahuad de solicitar achicar la brecha con el centro del país, donde recibimos un combustible más caro y ahora castigados con eventuales faltantes debido al gran incremento de la demanda misionera, en lugar de valorar y acompañar a una provincia que a base de trabajo y políticas ordenadas se posicionó dentro de las que más aporta a las arcas del Estado Nacional.
Las políticas de Estado se mantienen
En pos de contrarrestar el efecto producido por el aumento de los combustibles, Misiones mantiene el boleto estatal gratuito para que los estudiantes puedan acceder a sus instituciones sin preocuparse por el valor de la movilidad. El Gobierno provincial absorbe el costo del pasaje, establecido por ley para todas las modalidades educativas.
Asimismo, Misiones está dentro de las provincias que más impuestos nacionales recaudan, sin embargo es la que menos dinero recibe de coparticipación. “Es un esquema mezquino, no es federal y lo venimos reclamando hace muchísimo tiempo. Misiones aporta cuatro veces más a la Nación de lo que vuelve como concepto de coparticipación”, especificó hace poco el presidente de la Legislatura Carlos Rovira cuando inició el ciclo de Educación Disruptiva.
Con aportes provinciales se mantienen los programas “Ahora” que permiten que los misioneros accedan a beneficios en las compras de diversos productos y bienes de consumo. La economía familiar se ve favorecida con la financiación y los reintegros que implican la compra de todo tipo de objetos, desde los libros escolares a electrodomésticos.
Por otro lado, es necesario recordar las gestiones del gobernador en relación con la necesidad de sumar a la provincia al gasoducto del NEA. Herrera Ahuad pidió que el gas llegue a la provincia desde Vaca Muerta. Es preciso que se incluya a Misiones en el trazado del gasoducto porque es la única provincia que no cuenta con gas en red. Acceder a ella significaría disponer de gas para proveernos de agua caliente, calefacción y cocina de gas. Además, se lo podría utilizar como combustible para vehículos. La búsqueda de alternativas que brinden mayor bienestar a los misioneros forma parte de un reclamo constante que busca el reconocimiento de la administración provincial. Considerando esta situación y los reiterados reclamos en materia energética, demostrando el crecimiento y desarrollo ordenado de la provincia, es necesario que las refinerías complementen esa demanda adquiriendo más barriles ya sea produciendo barriles criollos o importando el Brent internacional pero nunca recortando recursos y más aún a aquellas provincias que demuestran constancia y orden en su desarrollo.